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¡Gérmenes! Esa palabra que asociamos con enfermedades y que, desde niños, nos enseñan a evitar. Muchos adultos aún sentimos cierta aprensión hacia estos pequeños seres invisibles. Con el aerosol adecuado, puedes eliminar el 99.9% de los gérmenes en casa. Pero si no los vemos, ¿realmente existen? La respuesta corta es un rotundo sí.
Pero aquí te damos una explicación más detallada:
"Gérmenes" es un término general que abarca casi cualquier microorganismo infeccioso, incluyendo bacterias, virus, hongos y mohos, y la verdad es que los gérmenes están por todas partes.
Ahora mismo estás rodeado de ellos. Flotan en el aire que respiras, están en tus manos, cubren tu ropa e incluso viven en los alimentos que consumes. ¡Miles de millones de ellos! Están ahí, creciendo, reproduciéndose y esperando la oportunidad de entrar en tu cuerpo, donde encuentran un ambiente favorable. Suena un poco escalofriante, ¿verdad?
Afortunadamente, cuentas con un sistema inmunológico fuerte y eficiente, y puedes contribuir a mantenerlo así y a que responda rápidamente con una buena alimentación, haciendo ejercicio, lavándote las manos y tomando los suplementos adecuados. Si tu sistema inmunológico está sano y fuerte, no tienes por qué preocuparte ¡Así que relájate!
Cada segundo, tu sistema inmunológico está luchando silenciosamente contra los gérmenes. Realiza este trabajo sin descanso, y en la mayoría de los casos, ni siquiera te das cuenta. Tienes miles de millones de células inmunológicas, cada una con una función específica para asegurar que cualquier intruso que entre por tu piel o mucosas (ojos, nariz, boca, pulmones, etc.) sea aislado, neutralizado y eliminado.
En muchos casos, la respuesta inmunológica comienza con un grupo de células especializadas llamadas células presentadoras de antígenos (como las células dendríticas, los macrófagos y ciertas células B).
Como su nombre indica, una de las tareas principales de estas células es encontrar, identificar y mostrar fragmentos de los organismos invasores a otras células inmunológicas. Al presentar estos "fragmentos" de los invasores, las células inmunológicas pueden reconocerlos y defender al cuerpo más eficientemente en el futuro. Muchas respuestas inmunológicas se inician gracias a estas células. Esta presentación puede ocurrir en un tejido, como la piel, o dentro de los ganglios linfáticos, donde una sola célula presentadora de antígenos puede mostrar la información de la amenaza a cientos o incluso a miles de otras células inmunológicas en muy poco tiempo.1
A partir de ese momento, tu sistema inmunológico se pone en marcha. Las células recién informadas buscan y eliminan activamente los gérmenes no deseados, actuando rápidamente antes de que causen problemas.
Este es un ciclo sin fin, los gérmenes desarrollan constantemente nuevas tácticas para distraer, desactivar o evitar de alguna manera al sistema inmunológico. Sin embargo, cuando el sistema inmunológico ha sido educado correctamente, se adapta de manera continua, esforzándose al máximo por mantener la salud.
Para la mayoría de nosotros, el sistema inmunológico gana la mayoría de las batallas. Sin embargo, cada cierto número de meses o un par de veces al año, los gérmenes ganan la batalla y te enfermas. Generalmente, esto sucede porque tu sistema inmunológico tardó en reaccionar o se vio abrumado por una gran cantidad de gérmenes. Aunque la recuperación lleva un poco más de tiempo, usualmente volvemos a nuestra vida normal con un sistema inmunológico ligeramente más inteligente y con más experiencia.
Aunque parezca sorprendente, es bueno que el sistema inmunológico libre batallas de vez en cuando. Al igual que cualquier otra parte de tu cuerpo, necesita ejercicio para mantenerse fuerte. Vivir en un ambiente completamente estéril no te llevará a una vida más sana porque el sistema inmunológico está diseñado para combatir gérmenes. Intenta no sobrecargarlo, pero permite que "flexione sus músculos" regularmente.2
El equilibrio y fortaleza del sistema inmunológico es tu mejor defensa contra todos esos gérmenes de los que te advertía tu abuelita.
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